Victoria; nos sobran candidatos
Faltan más de cuarenta días para que el INE y el IETAM instalen los procesos de renovación de autoridades 2020-2021, pero al menos en Ciudad Victoria, hay una notable invasión de aspirantes a ser candidatos a presidente municipal.
Aunque parezca increíble y usted no lo crea, la lista de pre-candidatos la encabeza el propio Xicoténcatl González Uresti, presidente municipal saliente, pues a pesar de que tiene convertida a la Capital de Tamaulipas en un chiquero, quiere la reelección.
Los observadores opinan que el PAN tendrá muchos problemas para retener el control del gobierno municipal, debido a que Xicoténcatl se ha ganado el repudio en colonias y ejidos, con una gestión plagada de errores, desaciertos, opacidad, y sospechas de corrupción.
El médico González Uresti buscaría repetir en el cargo edilicio, ya no tanto para seguir mangoneando el erario municipal, sino para que le alcance el tiempo y tapar los boquetes que existen en el gasto ejercido.
Acuciosos periodistas que han investigado con lupa los manejos financieros, como Héctor Sandoval, director del portal Noticiero de Victoria, publican documentos comprometedores, especialmente tratándose de facturas de empresas fantasma.
De acuerdo a estos documentos, Xicoténcatl pagó en una sola exhibición, más de medio millón de pesos, por un curso sobre inteligencia emocional, impartido por una empresa con dirección fiscal inventada.
Son más de ocho millones de pesos pagados con cheques de la tesorería victorense, a empresas factureras, de allí que Xico esté preocupado por repetir en el cargo, para tratar de reponer el dinero o justificar de otra manera verosímil, el egreso.
Miguel Manzur Pedroza se llama el presidente municipal, suplente de Xicoténcatl, y ya está en campaña por la reelección, pero ahora como titular del poder municipal.
Manzur fue director de comercio en el sexenio de Tomás Yarrington Ruvalcaba, pero mudó oportunamente al PAN cuando se percató que allí estaba el futuro. Recientemente pagó una encuesta donde aparece con el mejor posicionamiento.
Pilar Gómez Leal y Arturo Soto Alemán son diputados locales, del PAN, pero están apuntados como prospectos para la sucesión victorense. Pilar es de Reynosa pero le apuesta a su parentesco político con Pancho Cabeza, para ganar la nominación.
Soto Alemán es El Recaudador, especializado en meter la mano hasta el fondo en los bolsillos de los tamaulipecos, para sacarles pesos y centavos con pretexto de impuestos y pago de derechos.
Ya ha sido candidato a presidente municipal en dos ocasiones, pero no les hizo ni cosquillas a sus oponentes, del PRI, primero Alejandro Etienne Llano, y luego, Oscar Almaraz Smer.
Arturo iría por su tercera intentona, pero todavía falta saber cuál será la decisión de Pancho Cabeza.
Luis Torre Aliyan, abogado, sobrino de Egidio Torre Cantú, es segundo síndico pero quiere ser el jefe del Cabildo. Está gastando mucho dinero en el reparto de despensas, pero le falta estrategia y jefe de prensa.
Se asume como el campeón de la honestidad, pero el apellido lo contradice.
Un Sub-secretario de salud Alejandro García Barrientos también anda en las colonias entregando ayudas alimentarias, en lugar de visitar centros de salud para confirmar que combaten el Covid-19.
También tiene Alejandro el virus de la política y sus jefes no lo han reprendido por distraer el tiempo laboral en proselitismo electorero.
Mario Ramos Tamez es diputado federal, renunció al Partido Movimiento Ciudadano para pintarse de azul, en la creencia de que el cambio de camiseta le garantiza el ascenso a la candidatura.
Se vale soñar. Mario es un buen tipo, discípulo de Gustavo Cárdenas Gutiérrez, con gran capacidad de gestoría. Consiguió 56 millones de pesos en la Ciudad de México, para ser invertidos en la COMAPA victorense.
Por el lado del PRI, la diputada federal, plurinominal, Mariana Rodríguez Mier y Terán, es una magnífica carta, ganadora. Su familia tiene suficiente capacidad económica para emprender una campaña de proselitismo de alto nivel.
Mariana es una abogada de magníficas calificaciones. Se desempeñó como directora del Instituto de Investigaciones Parlamentarias, primero en Nuevo León y luego, en Tamaulipas.
Horacio Reyna de la Garza es regidor en el Cabildo que preside Xicoténcatl González Uresti. Es también presidente del PRI victorense, hijo de Horacio Reyna, responsable de la Fundación Colosio.
Emprendedor, dinámico, contestatario, es la piedrita en el zapato de Xicoténcatl.
Carlos Morris Torre, también del PRI, tiene la peregrina intención de buscar la nominación, sólo por ser sobrino de Egidio. Eso es lo que lo mancha, pero finge no saberlo.
La diputada local Patricia Pimentel Ramírez, de Movimiento Ciudadano, también podría ser una magnífica presidenta municipal, si es que Gustavo Cárdenas quisiera emprender con ella la aventura de rescatar la presidencia municipal.
Eduardo Gattas, de MORENA, también tiene descubierto su juego de ir por el cargo edilicio. Perteneció al PRI pero se dijo traicionado y renunció.
Adicionalmente, el beisbolista de grandes ligas Ismael Rocket Valdez anunció en redes sociales, que el lunes 27 de julio hará un importante anuncio, vía zoom. Se supone que se buscará ser alcalde, pero se ignora por cuál partido.
Rocket fue director de deporte en el PRI que manejó Ricardo Gamundi Rosas aunque sólo para efectos propagandísticos, pero últimamente ha presumido el deportista galardonado, de fotografías donde aparece con el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y más recientemente, el joven Diego de la Garza Montoto se “destapó” como candidato independente en Ciudad Victoria. No tiene antecedentes políticos, aunque su mamá Churu Montoto es activista social, ex regidora.
De buen humor, enfiestado, Diego gritó en una canción su candidatura, rodeado de amigos que le hicieron coro.
Hay otros tres personajes enigmáticos que deshojan la margarita. Felipe Garza Narváez es el candidato idóneo para Ciudad Victoria, pero él agradecería la oportunidad pero para ser diputado federal.
Cree crucial que la siguiente Legislatura sea de mayoría de MORENA, porque aunque él no es militante registrado, sí firmó a favor del Movimiento que llevó a AMLO al Palacio Nacional.
Oscar Almaraz Smer fue presidente municipal y perdió la reelección a manos de Xicoténcatl González Uresti, aunque es leyenda urbana que lo hizo a propósito porque Pancho Cabeza lo amenazó con meterlo a la cárcel, con cualquier pretexto.
Y Gustavo Cárdenas Gutiérrez podría escuchar el canto de la sirena y repetir como candidato, pues fue jefe edilicio en el trienio 1993-1995, y consiguió hacer un gobierno eficiente y honesto, a pesar de la obcecada oposición del Gobernador Cavazos Lerma.
(Agencia de Servicios Informativos).
