Cierta vez, me dijo el colega Beto Deándar:
–Quizá Manuel Cavazos Lerma, no fue un buen gobernador; lo que sí estoy seguro, es que ha sido un extraordinario ex gobernador.
Me pareció acertado el razonamiento.
Luego intercambiamos opiniones de los por qué de esa opinión.
Enumero, los más relevantes:
1.- Dejó la gubernatura de Tamaulipas, y pasó a ser un ciudadano común. Se marchó a la ciudad de México, se integró a actividades de su partido y jamás intentó participar en la política de su estado.
Ejerció relevantes cargos de su partido –PRI– como delegado en varias entidades del país, sin mover un solo dedo para obstruir o ayudar a quien lo relevó en el cargo.
2.- No obstruyó a su sucesor. Pisó la entidad, sólo para asuntos de familia y estrictamente personales. Tomás Yarrington, encarceló a uno de sus secretarios más influyentes, Pedro Hernández Carrizales, por diversos motivos que sirvieron para posicionarlo en el poder Ejecutivo estatal; ni externó criticas al gobierno estatal, ni intentó intervenir para resolver el asunto de uno de sus hombres de mayores confianzas.
La acción de TYR, le molestó superlativamente, pero lo guardó para si; no trascendió públicamente el enfado.
3.- No tuvo, el insano deseo de convertirse en un actor político transexenal. Vivió y ejerció sus seis años de gobierno, a plenitud. Sus colaboradores, tuvieron la oportunidad de hacer política en su administración; al terminar el sexenio, muchos sobrevivieron por sus propias virtudes en otros gobiernos, pero nunca recibieron de MCL, una recomendación para potenciar sus carreras después de su administración.
4.- Se ha manejado financieramente, con un discreto perfil. Otros ex gobernadores, exhibieron –exhiben– los exagerados lujos que obtuvieron con el paso de los seis años en el cargo. Mostraron, suntuarios bienes como casas, hoteles, coches, motocicletas y viajes a sitios paradisiacos; este desenfreno, incluía –incluye– a sus familias. Se ha movido con austeridad y discreción; su familia, de igual manera, operan exitosas, aunque medianas empresas.
5.- No cayó en la tentación de incorporar a su familia, a la administración pública y mucho menos a la política en el estado. Sus descendientes, laboran en la iniciativa privada, hasta donde se sabe.
6.- A pesar de impulsar un proyecto para renovar a la clase política tamaulipeca, no cohesionó un grupo político para mantenerse vigente en el estado. Otros gobernadores, aún estando en la cárcel, intentan influir en la vida pública tamaulipeca. MCL, se deslindó totalmente del estado.
7.- Sigue moviéndose, con su principal prenda: su capital cultural. Egresar de una de las mejores escuelas de Economía del país y la obtención de un posgrado en una de las instituciones educativas más importantes del mundo, han sido sus principales herramientas para sobresalir en un país en donde las élites, dominan el firmamento político.
En un recuento de hoy y de ayer, Cavazos Lerma, debe ser considerado como el gobernador de mejores y mayores prendas intelectuales y académicas en la historia de Tamaulipas.
Su tarea como gobernador, es otro tema.
El asunto, es su ejercicio como el ex gobernador, que ahora es.
Uno de los mejores ex gobernadores de Tamaulipas
