Con una gran actuación en las calles de Singapur, el piloto mexicano dominó la carrera de principio a fin y consiguió su segunda victoria del año. Charles Leclerc y Carlos Sainz completaron el podio.
Una tormenta cayó sobre el circuito de Marina Bay, la cual provocó el retraso del inicio de la carrera para que los comisarios pudieran retirar la mayor cantidad posible de agua del asfalto.
Partiendo detrás del poleman, Checo tuvo mejor tracción una vez que se apagaron las luces del semáforo y logró adueñarse de la punta en la primera curva. Caso contrario a su compañero de equipo, quien perdió cuatro posiciones.
Las condiciones mixtas en la pista fueron el principal reto de la carrera, pues existían sectores mojados y otros secos, lo cual complicaba las estrategias para los equipos.
Los incidentes no se hicieron esperar con seis coches retirados y dos apariciones del coche de seguridad que pusieron en riesgo el liderato que sostenía Pérez.
A falta de 30 minutos por correrse y con los neumáticos de piso seco ya instalados, Checo y Leclerc protagonizaron una tensa batalla por la victoria, con el monegasco intentando a toda costa pasar a su rival de Red Bull.
Sin embargo, el mexicano defendió como acostumbra y mantuvo a raya al piloto de Ferrari, el cual vio caer su rendimiento conforme pasaban las vueltas.
Rumbo al final de la competencia, la dirección de carrera anunció que investigaría a Pérez por una supuesta infracción al coche de seguridad, lo cual obligó al tapatío a conseguir una ventaja mayor de cinco segundos para cubrirse de Leclerc de una posible penalidad.
Esto motivó a Checo a seguir empujando hasta el final y conseguir un margen de más de 7 segundos, lo cual le aseguró la victoria.Navegación de entradas← Entrada anterior
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