López Obrador rompe con Martha Bárcena

16 febrero, 2023
López Obrador rompe con Martha Bárcena

Fue una sobreactuación de Marcelo Ebrard por varios motivos:

1. A estas alturas del sexenio y para fines del diferendo entre el secretario de Relaciones Exteriores con la embajadora eminente Martha Bárcena, no debería de existir polémica sobre las características técnicas del programa migratorio que Marcelo Ebrard ofreció al gobierno del presidente Donald Trump. Simplemente México no tenía (y actualmente tampoco lo tiene) un entorno de seguridad propicio para darle acogida a miles de inmigrantes.

2. No debería de existir duda alguna sobre la oferta que le hizo Marcelo Ebrard a Mike Pompeo y a Kirstjen Nielsen en noviembre de 2018, dos semanas antes de que AMLO tomara posesión: México recibiría a miles de inmigrantes solicitantes de asilo a Estados Unidos a cambio de que se les entregara visas humanitarias. La historia quedó escrita por los periodistas Julie Hirschfeld y Michael D. Sher en su libro Border wars: Inside Trump´s assault on inmigration.

3. Ebrard ha tratado de encubrir su encuentro con Pompeo y Kirstjen del 15 de noviembre de 2018 en Houston, y para hacerlo, sitúa su narrativa en mayo de 2019, cuando el presidente Donald Trump amenazó al gobierno de AMLO de imponer 25% de aranceles a todos los productos mexicanos de exportación.

4. Marcelo Ebrard dijo ayer en Palacio Nacional durante la conferencia de prensa de AMLO: “La exembajadora (Martha Bárcena) se ha dedicado desde que dejó su cargo a calumniarme en todos lados donde ha podido”.

La relación laboral entre Ebrard y Bárcena quedó marcada por la desconfianza desde el inicio del sexenio porque el secretario de Relaciones Exteriores quiso abrir una oficina a la sombra de la embajada en Washington. La historia la reveló la periodista Martha Anaya en su columna.

No es Martha Bárcena quien caricaturiza a Marcelo Ebrard. Lo hacen Mike Pompeo y Jared Kushner en sus respectivos libros recién publicados. Por ejemplo, el yerno de Donald Trump viajó a México en marzo de 2019 para advertirle a AMLO sobre los efectos que tendría un descontrol migratorio en la frontera.

En mayo de 2019 fueron detenidos por la Patrulla Fronteriza 133,000 migrantes; Trump enfurece y amenaza con imponer aranceles. Kushner escribe: “Tu truco funcionó, le dije a Trump. El canciller (Ebrard) mostró sus cartas. México se doblará” (Breaking History).

Lo estratégico de ayer no fue el choque de Ebrard con Bárcena sustentado en el enfoque técnico del programa migratorio. Sí lo fue la ruptura de AMLO con Martha Bárcena.

En varias ocasiones AMLO se reunió con varias figuras empresariales y políticas en casa de la embajadora Martha Bárcena. Y lo hizo con frecuencia durante su periodo de presidente electo.

Antes de ofrecerle la embajada en Washington, AMLO le propuso a la embajadora la dirección de Pemex. No aceptó por congruencia, no tiene experiencia en dirección de empresas.

Más allá del conflicto personal entre la embajadora y el secretario, se encuentra el tipo de relación entre Estados Unidos y México durante el gobierno de Trump.

Sorprende el nivel de sobreactuación de AMLO y Ebrard frente a la opinión pública: presumen de defender la soberanía del país, pero en secreto se doblan ante las peticiones de la Casa Blanca con enorme facilidad.

AMLO tiene el control remoto de las mañaneras. Si habría que linchar a Martha Bárcena, lo hizo a través de Marcelo Ebrard. Era necesario hacer zapping y pasar por alto las acusaciones de soborno en el juicio a García Luna en contra de Gabriel Regino, subsecretario de Ebrard.