Para unos, el operador morenista en Coahuila, José Ramón Gómez Leal, prácticamente llegó al final de su carrera política, al fracasar rotundamente como estratega del candidato guinda, Armando Guadiana Tijerina.
Pero para otros más optimistas, el JR obtuvo una gran victoria, tras el triunfo de Manolo Jiménez, abanderado de la coalición PRI-PAN-PRD, todos ellos afines al exgobernador Francisco García Cabeza de Vaca, cuñado de José Ramón.
De manera que, tal vez en MORENA, los bonos del JR no anden tan altos, pero en el lado de la coalición priista, panista y perredista, seguramente ya lo felicitaron ampliamente, como un leal miembro del partido azul, en la cual José Ramón militó durante veinte años. Y sigue siendo panista, en el ámbito de un cerrado círculo familiar, pese a que ocupa un escaño morenista en la cámara alta.
Caso curioso, antes de que ganara la senaduría vacante en Tamaulipas, José Ramón era un perdedor nato.
Personaje solitario, sin carisma y con un cúmulo de rencores y resentimientos almacenados bajo su cachucha, al ganar la senaduría, jamás tuvo la humildad para darle las gracias al mando supremo de la 4T en Tamaulipas. Y todo lo contrario, proclamó a los cuatro vientos que el solito, por méritos propios había ganado, sin la ayuda de nadie.
Dicen que más pronto cae un mentiroso que un cojo. Y miren ustedes, no pasó mucho tiempo, para que la historia le diese un tremendo zape a Ramoncito Gómez Leal….¿leal a quien?
Pues de acuerdo a los apabullantes resultados de los comicios coahuilenses, el JR fue a ese estado para reforzar a la coalición PRI-PAN-PRD.
Tal vez la consigna de los altos mandos de MORENA, era en el sentido de que JR le echará todos los kilos a favor de Guadiana. Pero al final pudo más la encomienda que le dieron desde el núcleo familiar en Reynosa. Ahora se sabe, que en petit comité, fueron varias las ocasiones en que, Guadiana le reclamó al líder nacional Mario Delgado, el haberle enviado un operador ineficiente…¿o acaso aliado de sus adversarios?
Con todo y lo que usted guste y mande, lo que se evidencio en la derrota morenista de Coahuila fue, entre otras cosas, la absoluta carencia de oficio político, por parte de un JR, que jamás pudo conciliar a los grupos del perdedor interno Ricardo Mejía Berdeja, y el candidato de la imposición Armando Guadiana Tijerina.
Ahora, lo único que le queda al prianista-cabecista JR, es buscar un acomodo en el oleaje de la sucesión presidencial de la marca guinda. A estas alturas, su padrino Adán Augusto, ya le perdió la fe, y es fecha que ni siquiera lo ha recibido en su oficina.
Apaleado políticamente en su primera prueba de fuego, que presuntamente lo validaría para hacer valer aspiraciones de un lejanísimo escenario sucesorio en Tamaulipas, hoy el JR se observa más cerca del PAN que del morenismo.
En Reynosa, el JR luce acotado por el poderío de la familia Peña Ortiz. En Tamaulipas, su triste figura sigue pululando por los contornos intrascendentes. Se le ve como alguien que simplemente no cuajó. Tal vez trate de hacer valer el padrón de sus tiempos de delegado, cuando se auto promovía un día sí y otro también en Facebook.
Pese a todo ello, se sabe que ya desde ahora la acaudalada familia reynosense del JR le está metiendo billete a las encuestas, para hacerlo aparecer como el más aventajado, en la ruta hacia el 2024.
Lo más seguro es que no habrá reelección para José Ramón, y que se tendrá que contentar con terminar el periodo del fallecido senador Faustino López. Y hasta ahí.
Y es que MORENA no puede darse el lujo de perder un escaño valioso en el senado. Por cierto, hasta ahora no sabemos que es lo que ha hecho el JR por esos más de 300 mil electores, que según presume, conquistó él solito.
Aunque es fecha que nadie se lo cree, dado su atravesado carácter, y su ausencia de carisma.
————CREAN LA VOCERÍA DEL SISTEMA DE SEGURIDAD PÚBLICA—
Este jueves dieron a conocer a quien encabezará la vocería del sistema de seguridad pública, cuyo mega cargo recae en el doctor Jorge Cuellar Montoya. El nuevo cargo, tiene dos ejes fundamentales: facilitador de la tarea de informar, y dar información fidedigna y oportuna para las y los tamaulipecos.
La instrucción que se tiene del gobernador, dijo el nuevo titular, es hablarle al pueblo con la verdad.
