Ni Justin Trudeau ni Joe Biden van a respaldar la contrarreforma energética de López, quien está vendiendo cara su derrota… Hablamos del alumno que reprobó tres veces economía en la carrera
Entre los argumentos absurdos de López, gana premio aquel de que si no se aprueba la Contrarreforma Eléctrica se le dará la espalda a Cárdenas y a López Mateos.
Cualquiera que lea la propuesta de la Reforma lopista, verá que no se busca el progreso del país sino apuntalar un régimen hegemónico.
Para López Obrador su contrarreforma, “no es un asunto de toma y daca, los principios y la dignidad no tienen precio, no se negocian”, se oye bonito.
Pero si algo no ha mostrado López en su gobierno, e igualmente la gente de su partido, es que no tienen principios ni dignidad, y menos capacidad.
No se ve cómo pueda defender López su contrarreforma ante Biden y Trudeau, quienes representan los intereses de los capitalistas de su país
Allá no se tragan eso de que: “Si no aprueban la reforma eléctrica pues van a terminar de demostrar que no representan al pueblo, que representan a las empresas extranjeras”.
En Canadá y Estados Unidos también hay pueblo, la energía está en manos privadas, y su pueblo vive mejor que el mexicano.
La lógica de la contrarreforma lopista es la del “dueño de la casa”, como le dicen sus tristes de diputados… Es la de quien quiere volverse un Tlatoani.
Invocar a Cárdenas y López Matos no es invocar a San Pedro y San Pablo, sino recordar a déspotas populistas, al estalinista y al de la “izquierda atinada”.
Cuando Lázaro Cárdenas expropió el petróleo, la mayor parte del anciano gabinete no había nacido y México tenía 19 millones de habitantes, 15 millones en pobreza.
La situación de las petroleras extranjeras en 1938 no tiene relación o comparación alguna con la situación de los inversionistas actuales en energía.
Menos existe relación entre el significado de poseer petróleo en la Preguerra Mundial y ahora cuando los combustibles fósiles están en artículo mortis.
En lo que si hay parecido es entre el Estado Hegemónico, la “dictadura perfecta”, que construyó Cárdenas y que pretende restaurar el Macuspano
Cuando López Mateos se decidió a expropiar la Compañía de Luz y Fuerza del Centro, lo hizo tan mal, que la empresa fue liquidada 45 años después por Felipe Calderón
Y en cuanto a que si no adoptan su contrarreforma van a ser como Carlos Salinas… No lo veo mal, hablamos de un abogado y doctor en Economía por Harvard.
El pleito con Salinas viene de atrás, de cuando al seleccionar el candidato del PRI a gobernador de Tabasco en 1988 ni lo vio ni lo oyó…
Entonces López Obrador, que en 1988 aún estaba en el PRI, se fue al Frente Democrático, desde donde asegura haber ganado las elecciones a gobernador.
Salinas continuó con la modernización de la economía mexicana que comenzó Miguel de la Madrid, y siguió desincorporando empresas con capital público.
En 1992 Salinas logró que George H. W. Bush y Martin Brian Mulroney apoyaran el primer Tratado de Libre Comercio entre naciones desarrolladas y una subdesarrollada.
El TLC o Tlcan no fue un logro menor, y si actualmente el presidente López tiene presupuesto para dilapidarlo, es gracias a la apertura comercial.
Pero López piensa que sí, que México necesita gobiernos como los de la Docena Trágica y regresar a una realidad económica que fracasó estrepitosamente
En 1982 privaba la política estatista de sustitución de importaciones que sumió a México en una gran atraso tecnológico, Echeverría había matado al Desarrollo Estabilizador
Quizá al Macuspano le haría bien entender el dicho del Filósofo de Güemez: “El que no se muere joven, ya de viejo no se escapa”.