El precandidato de la coalición MORENA-PV-PT, a la gubernatura de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, encabeza las encuestas rumbo a la elección de junio venidero. Su ventaja, se mueve en un rango de 20 a 25 por ciento, sobre su más cercano adversario el aspirante de la alianza que capitanea el PAN, Truco Verástegui.
¿De dónde emerge ese pronóstico?
Como todos los eventos sociopolíticos, es multifactorial.
A saber:
1.- La marca familiar. El nombre de Américo Villarreal -su padre, fue gobernador- es una carga histórica que le ayudó a posicionarse relativamente rápido entre la sociedad tamaulipeca. El gobernador, Villarreal Guerra, no hizo un mal gobierno; al menos, fue el último gobernador del Estado de bienestar, bien recordado por el pueblo; luego vendría la ola neoliberal -tocaría inaugurarla a Manuel Cavazos Lerma- que empeoró la entidad en muchos aspectos.
En todo el estado, existen más de dos mil quinientas comunidades, escuelas, monumentos, calles, colonias, ejidos, cuyo nombre es Américo Villarreal.
“Está cabrón, competir, con un precandidato que tiene su nombre en más de dos mil obras de todo tipo en Tamaulipas”, me dijo uno de los contendientes de Villarreal Anaya en la contienda interna de MORENA.
Cuando AVG inauguró el acueducto que provee de agua a ciudad Victoria, a finales de los años 80, estableció que esa construcción sin problemas cubriría la demanda hídrica de los capitalinos por veinte años.
Duró 20 años más.
2.- La marca política interna. MORENA es en todo el país el partido a vencer en todos los escenarios: local regional y nacional. Vinculado como movimiento al presidente Andrés Manuel López Obrador, en Tamaulipas, anda sobre todos los partidos y coaliciones por arriba de los 30 puntos. Se puede afirmar, que el lopezobradorismo, dejó ganada la elección.
3.- La marca política externa. El PAN en Tamaulipas, está a la baja. Tan en picada va, que el precandidato del PAN, Truco Verástegui, ha tratado -hasta donde puede- distanciarse del azul para abrirse a otras expresiones políticas. El Ejecutivo con sus recientes acciones -reemplacamiento a todo trance, y el veto al Fondo de Capitalidad- complica el escenario al aspirante del PRIAN y le hace la vida más forzada en un paisaje de por sí cuesta arriba.
A Verástegui, le dejaron un legado tan fétido como pesado; alcaldes, como Xicoténcatl González, Pilar Gómez, Enrique Rivas Cuéllar, Carlos Ulivarri y otros de triste recuerdo, hicieron garras la bandera blanquiazul.
Hace unas horas, el movimiento social del cual Hidalgo es el epicentro, se quejó de la administración estatal, por el hostigamiento judicial a algunos de sus correligionarios. Entre líneas, amagaron con votar por otras opciones.
4.- Una tercera fuerza, fragmentada. El PRI, con todo y que firmó el pacto para ir con el PAN, no va del todo en unidad. Decenas de dirigentes medios tricolores, se fueron a adherir a MORENA. Ello potencia el proyecto de Villarreal Anaya y evidencia fisuras en el PRIAN.
Como se ve: Américo, tiene la mesa servida.
Será sólo responsabilidad de él, la forma de ganar: desahogada, apretada o cuestionada.