Estado de México, 25 de noviembre de 2025 – En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, las colectivas feministas, feministas independientes, defensoras de derechos humanos y activistas sociales del Estado de México se reúnen para evaluar y denunciar la situación que enfrentan niñas, adolescentes, mujeres y personas gestantes en un contexto de violencia persistente y desigualdades estructurales.
Este 25N, las organizaciones alzan la voz para exigir al Estado acciones concretas que garanticen la vida, la libertad, la autonomía y la dignidad de todas las personas. En este contexto, también se conmemora el primer año de la despenalización del aborto en la entidad, una conquista histórica que, sin embargo, no se ha traducido en un acceso real y efectivo a la interrupción voluntaria del embarazo.
A pesar de su reconocimiento legal, las colectivas expresan su preocupación por las barreras que aún enfrentan las mujeres y personas gestantes al intentar ejercer este derecho. “La reivindicación de los derechos sexuales y reproductivos exige un compromiso institucional que aún no se ha materializado”, indican.
Aunque la despenalización del aborto representa un avance significativo, las colectivas denotan que la atención médica a quienes buscan este servicio sigue siendo deficiente. Tanto la desinformación como el maltrato en las instituciones de salud son prácticas comunes, donde el personal médico, en ocasiones, sigue afirmando erróneamente que la interrupción legal del embarazo “no es legal,” perpetuando así una cultura de negligencia y violencia institucional que vulnera la dignidad y la salud de quienes buscan acceder a este derecho.
“Exigimos un trato ético y sensible por parte del personal de salud, así como la garantía de una atención oportuna y libre de prejuicios. La interrupción voluntaria del embarazo debe ser considerada una urgencia médica”, recalcan las líderes de las colectivas.
En este primer aniversario de la despenalización, las acompañantes independientes de aborto también destacan su papel fundamental, brindando información, apoyo emocional y cuidados integrales en un contexto donde la institucionalidad es insuficiente. “Nuestra labor debe ser reconocida y protegida, pues somos quienes sostenemos y acompañamos a aquellas que enfrentan la necesidad de interrumpir un embarazo”, afirmaron.
A medida que se reflexiona sobre este histórico logro, las colectivas hacen un urgente llamado al Gobierno del Estado de México y a sus instituciones para:
– Poner fin a la violencia institucional y la simulación.
– Garantizar el acceso real a abortos libres, seguros y gratuitos.
– Erradicar el acoso y hostigamiento laboral dentro de instituciones públicas.
– Procurar justicia para las víctimas de feminicidio y de todas las formas de violencia.
– Implementar acciones efectivas contra la discriminación, la precariedad laboral y la violencia hacia mujeres y disidencias.
Las activistas recalcan que el aborto no debe ser solo un derecho legal en el papel, sino un derecho accesible y garantizado para todas. “En este 25N, reafirmamos nuestra lucha por un Estado donde decidir no sea un privilegio, sino una realidad para todas”, concluyen.
